Friday, April 22, 2011

Te quiero como loco (The Wave Pictures)

No podemos terminar. Pasé toda la Navidad sin fumar, mientras esperaba en vano que tus padres se fueran a dormir. Durante meses, me aguanté las ganas de fingir que te clavaba la tijerita de cortar las uñas en el cuello cada vez que te quedabas dormida. Por eso, no podemos terminar. Te juro que voy a comprarte más muñecos de peluche y lencería, chocolates en lugar de zanahorias y un buen vino en lugar de uno feo, si es que me acuerdo de tu cumpleaños. Ayer comí duraznos en lata; el jugo se escurría por mi lengua y mis labios, hasta deslizarse por mi pera y caer en la alfombra de tus padres. Pensé en el bien y el mal. ¿Por qué ser desordenado o desprolijo es considerado como algo malo? ¿No viviríamos todos mucho más relajados y felices sin andar cuidando de no ensuciar nada? El aire parece muerto, pero las cosas no terminaron aún. Te quiero como loco, te extraño todo el tiempo, voy a esperar toda la noche si hace falta. Anoche volví a casa y me preparé ron con coca. Mis padres dormían. Eran las tres de la mañana.